31 de octubre de 2013

¡¡Feliz Halloween a tod@s!!

Este año ha caído fenomenal, en viernes, así que much@s aprovecharéis para iros de puente. Parece que el tiempo no va a estar muy malo así que, si podéis, aprovechad.
Carol y su jardín también se van de puente a ver a los abuelos, tía y primos.
Como no queríamos ir con las manos vacías hemos hecho unos mini cupcakes decorados con chocolate blanco teñido de naranja y con non pareils y otras cositas muy Halloweeneras gentileza de mi compi, y unos mini donuts para disfrutarlos en familia.
 
 
Estos no son muy Halloween, pero es que eran los primeros que hacía con mi máquina de mini donuts nueva. Ya haremos una entrada como Dios manda sobre este tema. Prometido. 

También hemos hecho unos cuantos (como 25 más o menos) cake pops que los primos tendrán que decorar porque a mi ya no me daba tiempo a nada más así que, Pablo y Natacha, preparaos, que os toca currar. No es la primera vez que decoráis cakepops así que seguro que os van a salir fenomenal. Y si no, nos los comeremos igualmente, jejejej
 
Disfrutad mucho de estos días y cuidadito en la carretera los que viajéis. 
 
Hasta pronto.
 

29 de octubre de 2013

¿Dónde está el Lobo Feroz?

Alguien debería avisar a los tres cerditos, tan graciosos ellos y distraídos mirando por las ventanas, que está entrando por la chimenea.
 
Los Tres Cerditos es el cuento favorito de Avril, que cumplió un añito hace unos días. También es el cuento favorito de Carol y le gusta que se lo cuente todos los días de camino al cole. Menos mal que tengo una inventiva a prueba de bomba (más de lo que yo pensaba, la verdad) y vamos haciendo pequeñas variantes cada día para que la narración no sea siempre igual.
 
 
 
Pero vamos, que no importa si el lobo era ruso y antes de llegar al bosque vivía en La Estepa, o si la mamá de los cerditos les puso brócoli en el tupper para que crecieran muy sanos, el tema es que acabaron los tres metidos en la casita de ladrillos, con un susto de muerte en el cuerpo y  con el lobo intentando entrar por la chimenea.   
          
 Es en ese punto donde hemos “hecho la foto”.

 
Que sí, que los cerditos no me han salido con mucha cara de susto, pero yo creo que es porque no sabían lo que se les venía encima.

 
El texturizado de las paredes y las ventanas lo hice a mano, es decir, que no utilicé texturizadores porque no había ninguno que me gustara el resultado. Así que con un poco de paciencia hice los ladrillos y las vetas de la madera.
 
Las tejas del tejado están hechas una a una. Las corté con un cortante de galletas cuadrado y luego las dividía a la mitad porque me gustaba más que quedaran rectangulares. Las marcas del camino, las hice con las dos partes de una boquilla Wilton número 3.
 
Me encanta como quedó, con esos colores tan alegres y brillantes. Espero que a vosotr@ también os guste.
 
Hasta pronto.


25 de octubre de 2013

Tarta Tiffany & Co con joya


Hace mucho hice una tarta Tiffany. ¡¡Qué mono es el color de las cajitas de esta joyería, por cierto!!! Pena que no haya un fondant con ese pantone. ¡Es tan difícil conseguir el color exacto!


La que hice la otra vez era una cajita cerrada con su lacito. Esta vez, la cajita está abierta y se ve la joyita que encierra. Por si no os acordáis de la peli o no la habéis visto, ese collar intenta ser una réplica del que lucía Audrey Hepburn en la película.




Para que no fuera exactamente igual que la otra cajita, a esta le hice los bordes con pliegue. Así ya se ven un poquito diferentes.
 

En la parte de abajo de la cajita, donde está el collar, hice un rebaje de más o menos un centímetro para darle profundidad. Así el pañuelo y el collar se ven “dentro” de la caja y no “encima”. No sé si me explico.




Ah, debajo de la caja iba una capita fina de fondant blanco marcado con un texturizador con dibujo en forma de tejido que le dio un toque chulo. El pañuelito debajo del collar lo recorté con una de las ruedas del cortador de fondant, los puntitos los hice con la boquilla nº 3 de Wilton y lo rematé con esa especie de cosido que hice con otra de las ruedas del cortador.




Quedó mona, pero seguramente a la cumpleañera (y a mi también), aunque le gustó mucho la tarta, le habría hecho aún más ilusión que caja y joya fueran de verdad. Jejeje.
 
Ah, como soy un desastre y no tenía la cámara en casa, las fotos son cortesía del padre de la cumpleañera. Creo que lo voy a contratar porque le salen las fotos mejor que a mí. ¡¡Gracias!!

Hasta pronto.


21 de octubre de 2013

Mermelada de moras


Este fin de semana, aprovechando que el otoño está llegando con tranquilidad este año y las temperaturas aún son muy agradables, hemos ido a la sierra otra vez. No solo es ideal para mover un poco las piernas y respirar aire fresco después de pasar toda la semana en la ciudad, si no que en esta época del año la naturaleza nos regala cosas muy deliciosas como las moras.


Así que nos pusimos a coger unas cuantas medio en broma. Pero lo malo de las moras es que cuando estás cogiendo aquí, ves unas buenísimas más allá, y cuando vas más allá, ves otras aún más buenas y gorditas en otro zarzal. En resumen, que cuando nos quisimos dar cuenta teníamos un montón de ellas, muchas más de las que podríamos comer sin que nos diera un buen dolor de tripa.





Cuando mis hermanas y yo éramos pequeñas solíamos ir a cogerlas en septiembre y mis padres hacían mermelada, que era nuestra favorita. Recuerdo lo bien que lo pasábamos tanto con una cosa como con la otra porque si agradable era pasar el rato en el campo recogiéndolas, aún lo era más el olor que se quedaba en la casa mientras las moras hervían alegremente en la cocina.




Por eso, lo primero que hice al llegar a casa fue llamar a mis padres para que me dieran la receta. No puede ser más sencilla pero os la paso por si a algún@ os apetece probar a hacerla.


Ingredientes:
Moras

Azúcar (medio kilo por cada kilo de moras).

 

Elaboración: 
-    Lavad bien las moras y quitadles todos los piquitos que se hayan podido quedar al cogerlas.

-    Poned una cazuela con el azúcar en el fuego. Tenéis que ponerla a fuego medio bajo para que no se queme.

-    Añadid las moras limpias.

-    Removed bien, sobre todo al principio, para que no se peguen al fondo de la cazuela.

-   Dejadlas hervir hasta que las moras estén blanditas.

-    Dependiendo de la textura que os guste, podéis echarla en tarritos tal cual y quedará líquida y con las moras casi enteras, o podéis “triturarla” con la minipimer y luego pasarla por el chino para que quede más espesa. Pero como digo, eso depende de cómo os guste.

 
No puede ser más natural y está muy rica.

Hasta pronto.





10 de octubre de 2013

Macarons de chocolate al estilo Sainsbury’s

Llevo una eternidad prometiendo hacer macarons. Y si no una eternidad, lo he mencionado en al menos dos o tres entradas del blog (hablo de memoria). Bueno, pues por fin, les ha tocado.

Antes de empezar y dado que los macarons son un postre delicado que requiere una preparación cuidadosa, respetando muy bien sus tiempos, etc, quiero hacer dos cosas:

·         La primera recomendaros que si os decidís a hacerlos busquéis una receta sencilla. Os paso un par de links estupendos.bake-mania.com y cupcake-maniacs

·         La segunda, pedir disculpas a las blogueras cocineras que tanta dedicación, tiempo y cariño le ponen a este postre francés. Enseguida vais a entender por qué.



La historia de mis macarons de chocolate comenzó allá por junio en un viaje a Inglaterra con Carol.
Es cierto que el país anglosajón no es el mejor ejemplo gastronómico de Europa pero tienen algo que es genial: los lineales dulces de sus hipermercados.
Aquí tenemos que ir a tiendas muy especializadas a encontrar productos específicos para hacer nuestras tartas, cupcakes, etc pero allí, y en concreto en Sainsbury’s, puedes encontrar en un lineal que parece no tener fin todo tipo de toppings, fondants, non pareils, icings, papelitos de cupcakes, cajas, chocolates para fundir de todos los tipos…….
Y…. preparados para hacer postres entre los que están los macarons.




De ahí han salido los míos (lo digo con la cabeza un poco gacha y sin gritar mucho para que no me oiga mucha gente…jejeje).
 
Pero os tengo que decir una cosa: no serán como los “verdaderos”, igual que un arroz con leche casero (especialmente el que hace mi hermana) no sabe igual que el que encontramos en los supers; pero salen ricos, suaves, cremosos, incluso se nota la almendra en las galletitas y “dan el pego”, si me permitís la expresión, perfectamente.
 
Y ya no quiero mencionar que siempre salen bien y que están listos en un plis por lo que son ideales para quedar genial si te surge una merienda imprevista. Eso sí: cuando el horno timbre, sacadlos. Yo estaba de cháchara por teléfono y se me pasaron dos minutos, suficientes para que quedaran un pelín caramelizados.





Yo estoy deseando volver a Inglaterra para traerme más de otros sabores y probarlos. Si los habéis visto aquí, por favor no dudéis en compartirlo con nosotros.
 
Y si algún@ pensáis ir por allí os recomiendo que entréis en un hiper, preferiblemente Sainsbury’s, y os deis un paseíto por el lineal de “cositas golosas para hacer”, cuando acabéis vais al de “cositas golosas para comer” y termináis en el de chocolates. Ya me lo contaréis. J

Ah….importante para mis fans con intolerancia al gluten: ¡¡no os imagináis la variedad de productos sin gluten que tienen!!! Creo que merecería la pena cogerse un Easyjet ida y vuelta en el día y venir con dos maletas llenas. Impresionante. A ver si toman nota nuestros hiper de aquí.

Hasta pronto.